Volvio el futbol

El calor, la pretemporada, el desgaste fisico, la preparacion, la busqueda de esquemas y tantas otras excusas que generalmente utilizan los tecnicos y jugadores para hacer frente a las criticas por un pobre partido no fueron necesarias esta noche en el espectacular 3 a 3 de San Lorenzo y Boca en La Feliz, un encuentro que tuvo todo y no decepciono en lo mas minimo. A ver, repasemos: a los 7 minutos un gol del chico Nicolas Colazo puso en ventaja a un Boca que encontro el gol cuando recien se acomodaban en la cancha, en un ratito empato el Kily, con un zurdazo que se desvio en el uruguayo Gunino y un minuto despues con un golazo lo dio vuelta Bordagaray, no llegabamos al cuarto de hora y ya teniamos tres goles, siendo asi como se fueron al descanso.

El segundo tiempo de movida no fue muy dispar, dos equipos que se olfateaban, se median, se tiraban un par de manos pero no se hacian daño, hasta que a los cuatro minutos empato Viatri, tras empujar a la red un fallido remate que quedo colgado en el area. Desde ahi fue todo del Cuervo, que de tanto ir lo encontro a Abbondanzieri en un par de oportunidades al igual que en el primer tiempo y empato de por el coco (no Basile) de Bottinelli, quien desvio un gran centro con su cabeza y puso en ventaja al Ciclon.

Se moria la noche y el partido se terminaba, Boca no encontraba los caminos y Basile mando a la cancha al Optimista, quien otro que Martin Palermo, quien las hizo todas, entro, fue amonestado, inmediatamente a los 93 empato de cabeza para agregar un capitulo mas a su pendiente pelicula epica y en el festejo se saco la camiseta, ¿conclusion? Gol, doble amarilla y afuera, pero a quien le puede importar la expulsion si Boca habia empatado, fue asi como el juez pito el final de una calurosa noche marplatense que termino con el empate a tres entre dos de los grandes del futbol argentino y dejo mas que nada un par de reflexiones. San Lorenzo domino bien la pelota y tuvo peligro pero fallo mas de una vez en la definicion y en defensa dejo puntos muy bajos, la buena para el Azulgrana fue que a falta de una rutilante incorparacion ofensiva encontro respuestas en el pibe Bordagaray, que a pesar del nuevo año, sigue con su vieja costumbre: codearse con el gol. Del lado de Boca no se lo vio muy distinto a la palida imagen que mostro en el campeonato pasado, siendo un equipo cuando ataca, por ahi en esta oportunidad mas certero, y siendo otro cuando defiende, muy flojo y con una pobre actuacion de los laterales, ya que tanto Gunino como Monzon fueron desbordados permanentemente, por ahora siguen de preparacion y no hay mucho para agregar, esperemos que continuen partidos como este para saciar la falta de futbol en esta corta preparacion de otro semestre mundialista.