Si alguna vez tenía que ser, este
era el año. Con Barcelona eliminado antes de tiempo. Con este técnico y estos
jugadores. La décima, diez temporadas después de la última. Era la ecuación
perfecta para Real Madrid; pero esta vez el fútbol fue justo y, en una final
anticipada, premió al mejor de la serie.
Bayern Munich fue superior en
todo momento, en Alemania y en el Santiago Bernabeu. Incluso le hizo precio a
un Madrid que poco se pareció al que remató la Liga en el Camp Nou y que logró,
a duras penas, llegar a los penales. El equipo de Mourinho no pudo hacer pie ni
siquiera durante el 2 a 0 temporal que lo clasificaba a la final y Jupp
Heynckes, que había anticipado un encuentro largo, entendió que el negocio
estaba por el lado de Arbeloa alternando el tridente Robben-Gómez-Ribery.
Si Bayern no lo pudo ganar en el tramo
final fue justamente por el desgaste de la primera mitad. Le quitó la posesión
de la pelota al Madrid y por momentos lo obligó a defenderse con los once
jugadores en su propio campo. Hizo chiquito a un rival que venía entonado y le
cortó los circuitos. Eliminó las posibilidades de Xabi Alonso, y así Cristiano
Ronaldo, Ozil y Benzema, el mejor de los tres, se diluyeron. Fue perfecto el
partido de los alemanes.
En el suplementario Real Madrid
fue más por vergüenza que por convicción, pero ni así pudo torcer la historia.
En una contra Ribery le sirvió el gol a Gómez, que lo desperdició. En la
siguiente jugada un Kaká desconocido no supo resolver de primera. No mucho más en
treinta minutos de transición entre dos equipos que, un poco por el cansancio y
otro poco por mutuo respeto, se conformaron con una definición a suerte y
verdad, a pesar de la iniciativa de Mourinho para que sus dirigidos busquen la
victoria.
En los penales Cristiano Ronaldo,
Kaká y Sergio Ramos rifaron la vida extra que Casillas le había regalado al
Madrid. Schweinsteiger definió con seguridad y confirmo a Bayern Munich como la
bestia negra del madridismo, que sigue arrastrando su maldición en la Copa de
Europa. Un justo ganador que se suma a la inesperada final de Munich.
Coincido en un todo con el analisis, le hizo precio. Aunque creo que el Madrid se metio atras mas que lo que lo metio el Bayern. La superioridad manifiesta del Bayern en los dos partidos esta vez se plasmo en el resultado, aunque fuera en los penales. Ahora se viene una final con el Chelsea, que jugara a aguantar un partido de visitantes y diezmados. Saludos.
ResponderEliminarNo creo que en fútbol haya justicia, porque es obvio que no hay cuando te cobran goles o penales insólitos. El Bayern hizo un gran partido y es un legítimo finalista, al igual que el Chelsea.
ResponderEliminarSaludos
Es ilógico pensar que dos equipos Grandes como lo son El Brasa y El Madrid hayan sido eliminados por El Chelsea y El Bayer. Pero el Fútbol te da sorpresas, ni Messi ni Ronaldo estuvieron en el momento que debieron estar (en el momento de definir y llevar a su equipo a la clasificación), pero esto es sólo un resultado y ojalá sirva para recapacitar. Abrazo Futbolero
ResponderEliminarPlatini hace lo que puede, pero no tiene la culpa que tipos como Cristiano y/o Messi, que cobran 90.000 euros la hora...si 125.000 $ usa la hora, no sepan ecajonarla desde los 11 metros ¡
EliminarSi es que no se le puede dejar tirar un penalty a sergio ramos ¡¡
ResponderEliminarEl Bayern es justo finalista , apretó en el Allianz y supo reponerse al 2-0 del Madrid e incluso tuvo oportunidades , en especial Mario Gómez , de ahorrarse la prórroga .
ResponderEliminarUn saludo
maldición o falta de atino en los penales, pero en lo personal considero que el Real Madrid tuvo que ser el dominador del cuentro de principio a fin para poder pasar a la final y no solo por unos minutos
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