domingo, 8 de agosto de 2010

Combattimenti cuore


Paolo Di Canio se caracterizó durante toda su carrera por los extremos, era capaz de lo mejor y de lo peor tanto dentro como fuera de una cancha. Tuvo la brillante facultad de no pasar desapercibido jamás al mismo tiempo que sembraba amores y odios semejantes, ya que aparentemente caer en la intrascendencia no formaba parte de su filosofía de vida.
Contemporáneo de Giuseppe Signori, Demetrio Albertini y Daniele Massaro, inició su carrera en la Lazio, el club de sus amores, donde luego de un buen rendimiento fue adquirido por la Juventus. En la Vecchia Signora las cosas no le salieron del todo bien y encontró la salida ideal en un traspaso al Napoli. En el sur italiano maravilló a todos con sus gambetas endiabladas y una enorme calidad que incluía caños, rabonas y lujos de todo tipo.
Luego de su excelente temporada en Nápoles, Fabio Capello confió en él y se lo llevó al Milan. En el Rossonero compartió vestuario con Gullit, Baresi y Maldini, pero la presencia de Roberto Baggio le quitó protagonismo y lo relegó al banco de suplentes, por lo que decidió probar suerte en Escocia.
En el mítico Celtic Glasgow mostró una de sus mejores versiones, luchó por la obtención de la Premier League de Escocia hasta las últimas fechas, pero el Rangers de Paul Gascoigne terminó consagrándose campeón. De todas formas fue escogido como el mejor jugador del año en 1997, desplazando incluso a Gazza que había sido galardonado con el mismo premio un año atrás.
Tras la sobresaliente temporada en la liga escocesa, su brújula apuntó a Inglaterra. En el país de la Reina recaló en el humilde Sheffield Wednesday FC donde no sólo mantuvo la categoría sino que también logró llamar la atención de todos con triunfos resonantes y goles impresionantes, aunque tomó mayor notoriedad cuando empujó a un árbitro tras ser expulsado en 1998.
Un año más tarde fue transferido al West Ham United, donde seguramente vivió los cuatro mejores años de su carrera. En Upton Park se hizo ídolo de los Hooligans a fuerza de goles y sacrificio, además con el dorsal número diez en la espalda y la cinta de capitán en su brazo izquierdo, guió a los Hummers a la obtención de la Copa Intertoto en 1999. Uno de los actos más nobles lo tuvo en el año 2000 cuando en el último minuto de un Everton-West Ham que se encaminaba al empate en uno, tuvo la posibilidad de marcar el tanto del triunfo, pero decidió tomar la pelota con la mano ya que el arquero rival estaba tendido en el piso por una lesión. Debido a su gesto en 2001 fue gratificado con el Premio Fair Play. En el 2003 se marchó al Charlton Athletic.
En Valley apenas una temporada le bastó para dejar un grato recuerdo, sin embargo el corazón fue más fuerte y a pesar de resignar una oferta millonaria de renovación, volvió a la capital italiana para defender los colores de la Lazio. Su llegada provocó una revolución en Roma y fue muy festejada por los ultras del club que vieron en Di Canio el regreso de un hijo pródigo.
Para el clásico de enero del 2005 frente a la Roma se preparó durante toda la semana trabajando duro e incentivando a sus compañeros con una remera que decía: “Existen dos modos de volver de una batalla: con la cabeza del adversario o sin la propia”. Parece ser que sus palabras surgieron efecto, ya que lideró la victoria de su equipo convirtiendo uno de los goles y festejando ante los Irriducibili (el sector ultra de los tifosi laciales) con el saludo romano. Reconocido admirador de Benito Mussolini, cuando fue consultado sobre una posible sanción por su gesto, afirmó que cuando vestía la camiseta de la Lazio no le tenía miedo a nada.
Finalmente en el 2006, las diferencias con el director deportivo del club, Gabriel Martino, provocaron la salida de Di Canio que decidió firmar contrato con el modesto Cisco Roma de la Serie C2 (la cuarta división del fútbol italiano), allí permaneció hasta el año 2008, cuando acabó retirándose de la actividad deportiva.
Quizás no haya sido uno de los mejores jugadores del mundo y ni siquiera uno de los elegidos de su generación, pero al menos supo como dejar una marca imborrable dentro del fútbol, recurriendo a sus principios y a sus convicciones sin dejarse dominar por los negocios del deporte profesional que convierten a los futbolistas en funcionarios. Afortunadamente pudo escapar de esos preceptos para convertirse en el líder positivo de todos los equipos que conformó. Como marca el fascismo, se necesita un pueblo, un imperio y un guía. Paolo Di Canio podría cumplir perfectamente ese rol.

13 comentarios:

  1. Ciertamente, se caracterizó por ser Un Guerrero Incansable y Perseverante y supo dejar huella donde transitó con su fútbol, solía ser un poco reacio a la acatación de normas y se mostraba rebelde a determinados esquemas disciplinarios.., ello conllevó a que no fuera citado para participar de la Selección Azurra. Gran Jugador..!! Un Abrazo Futbolero..!!

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  2. Hay algo en lo que se relacion Di Canio con usted señor Rodriguez, la parte de CANIO, bombonaso

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  3. muy buena la nota, un jugadorazo... sin dudas fue un antes y un después en cada club que paso.

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  4. Sin duda un gran jugador al que tuve la fortuna de ver en directo.

    Te dejo aquí mi blog por si quieres hacerte seguidor http://desdeelvillamarin.blogspot.com/

    Saludos!

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  5. Mis más sinceros respetos a este jugador. En resumen, tenía huevos, una gran persona y también fue un gran futbolista.

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  6. En efecto , un jugador capaz de lo mejor y lo peor .

    Un saludo

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  7. Un gran jugador con un carácter "distinto". Un trotamundos que ha dejado buen sabor de boca en todas las aficiones de los equipos en los que ha jugado. Ya no hay jugadores como él. Un grande que, desgraciadamente, en muchas mentes aparece como un simple "provocador" por sus ideas políticas.
    Gran entrada!

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  8. Un gran jugador capaz de hacer cualquier cosa , en todos sitios que ha estado la gente le ha agradado por algo sera ...... saludos ¡¡

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  9. Mucha pulenta de este facho (que no veo el porque de que sea malo serlo se estigmatiza a mas de uno por eso pero en este caso muchos lo adulan, cuestion de pareceres, pero no quisiera meterme tanto en eso). Y tambien un caracter de la gran puta. Creo que olvidaste recordar que fue contemporaneo de Fabrizio Ravanelli, otro groso más. Por la época, era un distinto y ahora, más todavia se nota, en estos ultimos tiempos de jugadores pecho frios y calcados.

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  10. 塑膠棧板使用壽命是最長的!
    眼袋讓妳變成熊貓?
    人力仲介主要不是人力銀行。
    外籍新娘一定要有政府合格證照。

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  11. Si hubiera más jugadores como estos, el fútbol sería más lindo. Temperamento, personalidad, compañerismo. Abrazo!

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  12. Recuerdo que la "oveja" Leonardo Talamonti contó en una entrevista que Di Canio tenía una banda de heavy metal en Roma, y que el ex defensor de Central(amante del heavy) le regaló unos discos de Almafuerte que le encantaron.
    Saludos

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