El 29 de mayo de 1969 Córdoba amaneció agitada. Las tensiones entre las empresas y los sindicatos que buscaban mejores condiciones de trabajo se agravaron por la gran cantidad de gente que iba llegando al centro de la ciudad para apoyar la protesta que originariamente era de unos pocos trabajadores. La represión policial ordenada por el entonces presidente de facto, Juan Carlos Onganía, encontró la respuesta del pueblo cuando se conoció la muerte del sindicalista Máximo Mena. El primer estallido popular argentino fue conocido como el Cordobazo y arrojó decenas de muertos y cientos de heridos que tiempo más tarde fueron tildados de insurrectos.
El 25 de enero de 1978 tuvo lugar el otro Cordobazo, el que a nosotros, con todo el respeto que merece el levantamiento trágico que lo precedió, realmente nos interesa. Aquella noche de verano el Independiente copero de José Omar Pastoriza definía el torneo Nacional 1977 con Talleres. La ida se había jugado en Avellaneda cuatro días antes y el empate en uno había sonado a triunfo para los cordobeses que esperaban dar la vuelta en Barrio Jardín.
“Talleres por la Gloria”, “Con el corazón de albiazul” y “Talleres con Independiente: la finalísima” eran algunos de los titulares de los diarios que no hablaban de otra cosa, todos los ojos de la provincia estaban puestos sobre ese partido. El equipo de Roberto Marcos Saporiti era el gran representante del interior y uno de los pocos que podía hacerle sombra a los grandes con un gran plantel. De hecho meses más tarde José Daniel Valencia y Luis Galván, figuras claves de la institución en esos años, participarían en el Mundial de Argentina 1978 que luego ganarían.
Esa final marcaría un quiebre en la historia de Independiente porque a pesar de comenzar ganando con el gol de Norberto Outes, las sospechas y especulaciones cambiarían rotundamente el trámite del partido. Ya en el complemento el árbitro Roberto Barreiro comenzaría a tomar protagonismo sancionando un penal dudoso que Ricardo Cherrini cambiaría por gol para darle el empate a Talleres.
A los veinticuatro minutos del segundo tiempo ni el árbitro ni el juez de línea advirtieron que Ángel Boccanelli había desviado un centro desde la derecha con la mano para convertir el segundo gol que consagraba a los locales. A partir de ese momento Enzo Trossero, Omar Larrosa y Rubén Galván se irían expulsados por convertirse en los comandantes de una protesta que les pertenecía por derecho. Los jugadores intentaron marcharse de la cancha en repudio a la actitud de la terna arbitral pero Pastoriza los convenció para que regresen a jugar los minutos que faltaban. “Vayan y jueguen, sean hombres y ganen el titulo”, fue la arenga del Pato para hacer frente a la injusticia.
Los visitantes tenían razones de sobra para indignarse ya que sabían que Luciano Benjamín Menéndez, gobernador de Córdoba, tenía una fuerte ingerencia sobre la junta militar que presidía el país en ese momento y además estaba muy interesado en que Talleres salga campeón.
Ya con ocho jugadores, Independiente debía ir por la patriada. No eran pocos los que apostaban por una goleada de Talleres. Sin embargo Pastoriza se la jugó y acertó con los cambios: Ricardo Bertoni y Mariano Biondi ingresaron por Outes y César Brítez respectivamente.
Cerca del final y cuando la Boutique era un infierno que ya proclamaba campeón a su equipo, el gran protagonista de la noche apareció para encaminar la gesta. A los treinta y ocho minutos Ricardo Bochini tras una pared con Bertoni definió de zurda el campeonato más sufrido del Rojo en su rica historia. Era la primera vez que en un torneo argentino un equipo lograba marcar un gol con tres hombres menos que su adversario. Por diferencia de gol visitante Independiente se consagró campeón y en gran parte fue gracias a Bochini que lo hizo posible encabezando una hazaña heroica que hasta nuestros días sigue logrando que los hinchas del Diablo se golpeen el pecho con orgullo anhelando viejos tiempos de gloria.
Todo es posible estimado Matías, la conclusión que saco de esta lectura es que nunca se debe tirar la toalla al ring, aunque como en este caso lo tengas todo en tu contra :-)
ResponderEliminarmuy bueno mati. desde ese día en córdoba se conmemora el 25 de enero como el DÍA INTERNACIONAL DE LA GALLINA. abrazo amigo!
ResponderEliminarGracias por hacerme acordar de esta historia que mi gente grande tantas veces me contó.
ResponderEliminarMuy lindo de verdad.
Más allá de las expulsiones y de contar con 3 jugadores menos,la diferencia entre un Equipo y otro, la marcó un excelente Jugador llamado RICARDO ENRIQUE BOCHINI (a) "El Bocha", tan sencillo, tan humilde, como "Tan Grande". Abrazo Futbolero..!!
ResponderEliminarGran post recordando lo del cordobazo tio , todo es posible en la vida amigo mio , cada vez me gusta mas tu blog macho ¡¡ saludos ¡¡ , cuando puedas te pasas por mi blog y me ves fotografiado con la copa del mundo que gano españa a holanda ¡¡¡¡
ResponderEliminarExcelente historia...Qué gran equipo aquel Independiente!!Cómo han cambiando las cosas por estos tiempos,creo que los hinchas del rojo deben extrañar horrores esas épocas de gloria!
ResponderEliminarMuy buena la nota y fantástica la contextualización histórica del comienzo!
Saludos Matías!
Grna reportaje, todo es posible en el fútbol...
ResponderEliminarUn saludo!!!
El fútbol cada vez se desvirtua más, pero historias como esta nos acercan a la esencia de lo que fue y dejó de ser.
ResponderEliminarUn saludo desde Qué bello es el fútbol
Siempre nos deleitas, con tus entradas, Mati, un saludo.
ResponderEliminarY aún ningún equipo cordobés (excepto Talleres) pudo ganar ningun campeonato, excepto ascensos. Y lo más triste es que no hay representantes en Primera de esa provincia.
ResponderEliminarsaludos
http://d-coleccion.blogspot.com/
Hola Matías
ResponderEliminarDato deportivo y hechos sociopolíticos. Un blog de lo más completo :)
saludos
Genial recuerdo!!! Nunca un equipo cordobés estuvo tan cerca de ganar un título local. El otro equipo cordobés q estuvo cerca fue Racing en 1980 cuando perdió la final del Nacional contra Central. Talleres tbn salió tercero en el 2004. Saludos!!
ResponderEliminarUna remontada de coraje, casta, garra en definitva de ponerle huevos. Saludos.
ResponderEliminarMUCHACHOS LES REGALO LA SORTIJA..A VER SI DAN UNA VUELTA ¿MAS?NOOOOOOO .JAJAJAJAJ CHE DE TANTO CONTAR CHISTES Y BAILAR CON RODRIGO,Y TAMBIEN DE PERDER DAVIS,SE OLVIDARON DE JUGAR AL FUTBOL ,JUEGUE BELGRANO JUEGUE .JAJAJA NI A LAS CANICAS UDS.JAJAJAJAJ AH Y HASTA NADAN Y JUEGAN AL HOCKEY Y CAPAZ Q HASTA TIENEN GENTE Q INFLUYE EN EL PENSAMIENTO POPULAR...NO SOS NADA BELGRANO..Y LO PEOR PARA VOS ES Q TE CUESTA ADMITIRLO,DATE CUENTA ..AGRADECE Q TODAVIA LE SACAS UNA VENTAJITA A IACC..Y ESO QUE JUEGO EN EL ARGENTINO,JAJAJA CORDOBA SOLO ALBIAZUL Y LO SABES Y TE DUELE
ResponderEliminarbuff, gran historia Matías!! es siempre interesante leer este tipo de anécdotas que quedarán para siempre en la historia...
ResponderEliminarSaludos!! ;)
Como se echan en falta esta clase de equipos. Aquel Independiente reunía técnica, coraje y un enorme compromiso.
ResponderEliminarEnorme Pastoriza y más grande aún el Bocha!!
sihastaguemesesmatador??..,estás descolgadímimo Papá...!! este fue un partido en "Talleres e Independiente" loquito..!! Qué tiene que ver Belgrano en esto..?? creo que tomaste la pastilla euivocada "matador"..!! ha.. perdón.., ¿matador de qué..? papito..!! Yo.. sihastaguemesestelapone
ResponderEliminarEjemplo de que si no se bajan los brazos todo es posible. Abrazo!
ResponderEliminarSe hizo justicia.
ResponderEliminarCabe recordar que ese mismo año Belgrano compartió zona con Independiente y Belgrano le ganó, aunque aún así no pudo clasificar (creo que quedó segundo y ese año solo clasificaban los primeros, a diferencia de otros años).
Todo lo relacionado a la dictadura es muy triste, y en ese tiempo ser de Belgrano estaba bastante ligado al peronismo o a los partidos de izquierda, mala palabra en ese tiempo, al igual que había pasado durante la dictadura con Onganía.
Mi abuelo, ferviente hincha de Belgrano, me dice que en ese tiempo era bastante jodido y turbio todo, más de una vez no lo dejaron pasar al estadio por no tener el DNI encima.
Por otra parte la junta militar había intervenido la liga Cordobesa de Futbol, un desastre tras otro. Tanto en el futbol como a nivel país.
Pero lo que más me cuenta con orgullo (sus dos orgullos son ser hincha de Belgrano y ser Peronista) es salir del estadio y cantar el "viejo y glorioso Belgrano" con el ritmo de la marcha peronista para que los milicos se caguen de bronca.
Texto aparte para el ídolo de Maradona, Ricardo Bochini... un groso.
Otro texto aparte, para recordar que hay cosas que no se deben olvidar nunca: la dictadura y sus injusticias que iban desde la desapariciones de personas hasta manos negras en el futbol con la 1309. Lamentablemente el Club Atletico Talleres quedará marcado para siempre como el club de la dictadura, duela a quien le duela, pero esa es la principal diferencia que hay entre Belgrano y Talleres. Entre el que la pelea de abajo y el que llega por decretos militares en ese momento o por apelaciones y pedidos a Grondona (que también estaba durante la dictadura).
hasta cuando van a mentir con eso de talleres y dictadura...talleres accedio a jugar en primera porque rompio culos y lleno tribunas durante 5 años seguidos...si ustedes no tienen una puta hazaña q contarles a sus hijos no tienen porque ensuciar la de los demas...con el mismo ctriterio q logro talleres meterse en el futbol grande de argentina lo hicieron tambien iacc y racing,si vos pitufito mediocre por entonces jugabas el regional no es la culpa de los otros 3 equipos.
ResponderEliminarestoy podrido de escuchar birgenes esteriles que por resentimiento o por envidia inventan cualquier ganzada,como la de los 15 años de victorias celestes,como cuando desprestigian la conmebol q talleres jugo y gano,en fin DE TANTO MIRAR OPOR LA VENTANA AL VECINO SE LES VIENE EL TECHO ENCIMA Y NO SE DAN CUENTA